3) Sigue los protocolos adecuados dentro del barco de buceo
Te sorprendería saber cuánta gente tiene un equipo de buceo igual que el tuyo, máxime si lo has alquilado en la tienda de buceo. Subir al barco y desparramar tu equipo por doquier es un gran error. Ten en cuenta que, se pueden provocar accidentes, pero no sólo eso; mucha gente aparta las cosas que les estorban para colocar las suyas en el barco, las desplazan del sitio y cuando su dueño va buscarlas no las encuentra retrasando la inmersión y desesperando al resto del grupo y así mismo. Te suena, ¿verdad?
El mejor consejo de buceo para evitar situaciones como estas es el siguiente: sube al barco, coloca tus cosas todas juntas y déjalas lo más recogidas posible. Si el equipo es de tu propiedad, además, márcalo con tu nombre.
Otro punto importante en un barco es el momento de entrar al agua. No importa si vas realizar una zancada de gigante o una voltereta hacia atrás, lo cierto es que en ese instante tu visibilidad está limitada por las gafas, por el equipo o porque estás de espaldas. En otras palabras, no tendrás una noción completa de lo que está ocurriendo en el agua. Así que sigue nuestro consejo de buceo y espera la doble conformidad de la tripulación y de tu compañero. Así evitarás percances.
En el artículo The Do’s And Don’ts On A Dive Boat encontrarás estos y otros consejos para moverte con seguridad en un barco de buceo.
4) Desciende y asciende siguiendo un cabo
Ya sabemos que los buceadores prefieren descender en caída libremente por el azul del mar. Pero si lo que pretendemos es mejorar nuestro desempeño, entonces nuestro consejo de buceo es: asciende y desciende siguiendo un cabo. ¿Cómo hacerlo? A horcajadas del cabo, pasándolo entre las piernas. Así si la corriente es muy fuerte no correrás el riesgo de soltarte y perderte.
¿Por qué usar el cabo?
¿Has oído alguna vez la frase “os espero en el fondo”? Es horrible. Significa que pretendes ir al fondo sin esperar a los compañeros en los momentos más críticos de una inmersión. Sin embargo, bajando y ascendiendo por el cabo se evita esta situación, ya que todos los buceadores descienden en la misma línea con lo que es más fácil reunirse en el fondo. Además, si alguno tiene algún problema, el resto puede esperarle y ofrecerle aire si es necesario.
Cuando asciendes ayudándote del cabo ya no dependes sólo de la fuerza de tu aleteo. Si hay algún problema incluso podrías ascender a pulso por el cabo directo al barco.